Marta García

Nacida un día de verano. 5 de julio de 1997. Fue el verano en el que tenía 7 años, cuando le dije a mi madre, mamá yo quiero hacer eso. Estábamos en casa viendo una telenovela, y le dije: “Mamá de mayor quiero hacer eso”.

De niña, , me encantaba encerrarme en mi habitación a actuar, a aprenderme monólogos de películas y hacerlos delante del espejo de mi cuarto, bailar, cantar… El mundo se volvía mejor cuando era otra persona

Con 16 años me di cuenta que quería hacer teatro, pero de verdad. Quería ser actriz, empezando mi formación en el Bachillerato de Artes Escénicas en el IES. Ramón y Cajal de Murcia. A la vez, me formé en la escuela TEATRES durante un año con Karen Matute, de la cual, aprendí maravillas del teatro, y sobre todo una gran base. Gracias a su labor como maestra y mi esfuerzo, conseguí acceder a los estudios superiores de interpretación en la ESAD de Murcia.

La ESAD me cambió la vida, ahí aprendí de las mejores personas, a nivel personal y profesional. Pero sobre todo me di cuenta de por qué quería ser actriz y por qué mi cuerpo me lo pedía desde tan pequeña. Cuando me subo a un escenario, o cuando creo un personaje, es como salir fuera de mi, para que entre otra persona, a la que escuchar, ayudar y dar voz. Para mí actuar, es mucho más que contar historias, es sanar mi alma y la del espectador, es conectar con algo, que todos tenemos pero no sabemos que está. “Es estar en el aquí y ahora, por y para el otro”; Qué es algo que durante el día a día se nos olvida. Para mi actuar, es equipo, es trabajo, es compromiso, y es VIDA. Por eso, soy actriz. Y, como decía uno de mis maestros “interpretar es el arte de engañar al cerebro y modificar al otro”.